Cuento de Nicolás Pernas

EL VIAJE DE JUAN

Juan era un chico que vivía con su mama y su papa en su casa en Avellaneda, estaba acostumbrado a vivir solo con sus papas, al ser hijo único. Siempre tenía lo que quería y no se hacía problema por nada.
Un día Juan estaba jugando en la pileta de su casa cuando quiso dar un salto y se cayo, en ese momento Juan se desmayó, pero para el fue como si hubiera realizado un viaje. De repente se encontraba en un jardín bien grande, solo, no había nadie a su alrededor, después de un tiempo empezó a gritar a ver si alguien podía escucharlo porque ya estaba aburrido, pero nadie le respondió.
Después de mucho tiempo cuando Juan ya estaba llorando porque extrañaba a su mama y a su papa, escuchó una voz, era una hormiga, si una hormiga estaba hablándole y le empezó a decir que si el estaba ahí por algo debía ser, entonces Juan empezó a reflexionar y a pensar que podía ser lo que le decía la hormiga, pero no encontraba nada.
- Todavía no te diste cuenta?-le dijo la hormiga
- No, en realidad no entiendo que hago acá, me quiero ir a mi casa.
- Estas acá porque estabas jugando en tu casa y te caíste, te golpeaste, te desmayaste, y las personas que se desmayan vienen a este mundo para que yo y mis amigos los hagamos pensar
- Pero no voy a ver mas a mis papas?- pregunto Juan casi llorando
- Si vas a volver a verlos- le dijo la hormiga- pero para poder volver a tu casa tenés que prometerme que vas a dejar de ser egoísta como sos, que vas a compartir las cosas y que vas a ser un poco mas bueno con los demás.- le dijo la hormiga
- Si si, yo te lo prometo, pero por favor quiero volver con mi mama – lloraba Juan
- Bueno basta de llorar que ahora llamo a mis amigos y te llevan – le ordenó la hormiga. – Flash!!! – gritó la hormiga – vení Flash que tenes que llevar a Juan a su casa.

De repente un elefante gigante con cabeza de caballo y patas de león apareció en frente de Juan.
- No tengas miedo – le dijo la hormiga – el es Flash mi amigo que te va a llevar a tu casa más rápido de lo que crees...
Juan le hizo caso y se subió arriba de Juan que le dijo que se agarrara bien fuerte porque iban a viajar muy rápido. Y en menos de medio minuto Juan se despertó en su cama.
Su mamá le contó que estuvo tres horas dormido por el golpe, pero que el medico le había dicho que ya se iba a despertar y que no tuviera miedo. Juan le contó a su mama el viaje que había tenido y le dijo que a partir de ahora iba a ser mucho más bueno con los demás e iba a dejar de molestar a las demás personas.